Procedimiento
60 minutos
Paso 1
Cortar las vainillas por la mitad. Cubrir con ellas el fondo y los bordes de un molde redondo, desmoldable, de 28 cm de diámetro.
Paso 2
Con mucho cuidado y con la ayuda de un pincel, humedecer las vainillas con el oporto.
Paso 3
Colocar los 200 g azúcar en una olla y cubrir apenas con agua. Llevar al fuego y cocinar hasta obtener un almíbar a punto bolita fuerte.
Paso 4
Mientras se baten las yemas con el batidor de alambre fino de tu batidora PE- BMP19, volcar el almíbar en forma de hilo. Agregar la esencia de vainilla y continuar batiendo hasta llegar a punto letra.
Paso 5
Por otro lado, batir a medio punto la crema con 5 cucharadas de azúcar, e incorporar en forma envolvente al batido de yemas.
Paso 6
Batir las claras, siempre con el batidor de alambre fino, con 5 cucharadas de azúcar a punto nieve, e incorporarlas también de manera envolvente con movimientos suaves para no bajar la preparación.
Paso 7
Volcar la mezcla en el molde y llevar al freezer durante 4 horas o hasta que esté firme.
Paso 8
Decorar la torta con las grosellas antes de servir.
Recetas del Cocinero
Perfecto para los amantes del té y del chocolate, cada bocado es una experiencia única que despierta los sentidos.
3
5
Perfecta para disfrutar sin culpa, cada bocado es un equilibrio entre sabor y bienestar.
1
3
Perfectos para adornar tus fiestas o como un capricho festivo, son irresistibles y llenos de alegría.
1
2
Son crujientes por fuera y suaves por dentro, ideales para acompañar un té o como un capricho en cualquier momento.
1
1
Con su textura esponjosa y su irresistible aroma, cada bocado es un lujo para tus sentidos.
2
1